Hoy, 5 de junio, celebramos nuevamente una fecha doblemente especial para nosotros: el aniversario del nacimiento de Enrique Talg Schulz y el Día Mundial del Medio Ambiente. Una coincidencia que, lejos de ser casual, simboliza perfectamente su vida y su legado.
Enrique Talg Schulz fue uno de los pionero del turismo en el Puerto de la Cruz. Con una visión integral del turismo, organizaba rutas turísticas que permitían a los visitantes descubrir los rincones más auténticos y encantadores de la isla. Y como sabía que la cultura es parte esencial del alma de un destino, también impulsaba bailes folclóricos que conectaban a los viajeros con las tradiciones vivas de Canarias. Fiel defensor del entorno natural de Tenerife, aprovechaba las épocas de baja ocupación en el hotel para contribuir activamente a la mejora del entorno. En aquellos días más tranquilos, se dedicaba a plantar palmeras en el parque del Taoro, aportando belleza a este emblemático lugar.
Posteriormente, fue director del Hotel Martiánez y su labor fue reconocida por el Ayuntamiento del Puerto de la Cruz, que le dedicó una calle con su nombre.
Pero sin duda, su proyecto más personal fue la construcción del Hotel Tigaiga, que abrió sus puertas en 1959. Fue la culminación de su sueño: un hotel integrado en el paisaje, que respetara el entorno y ofreciera una experiencia de calidad a los visitantes. Lamentablemente, Enrique Talg Schulz falleció pocos años después de la inauguración, pero su legado continúa muy vivo en el Tigaiga.
Hoy, en el Día Mundial del Medio Ambiente, recordamos con orgullo a Enrique Talg Schulz y renovamos nuestro compromiso con los valores que él defendió: la hospitalidad, el respeto por la naturaleza y la responsabilidad hacia nuestro entorno.